sábado, 12 de mayo de 2007

Donde habita la poesía

Son tantos los poetas que defienden la suprapresencia de la poesía en la poesía.
El último, el flamante Cervantes, Antonio Gamoneda: “la poesía no es literatura”. La poesía es auténtica emoción, la poesía es verdad, no es fábula ni construcción, viene a decir, y es elevación , por supuesto.
Y por más que Gamoneda se crea un ser raro y único, cuyo trabajo (y supongo que pensamiento) no se corresponde con el que hoy hacemos los demás(perdonen que me incluya en la camarilla de los poetas), esta idea suya es la más manida y gustosa por/a los versi-literatos.
¡Oh raro Pessoa!, al que Daniel Aldaya nos recordaba en la presentación de su libro (“SMS”, Calambur, 2007) en el Círculo de Bellas Artes(27 de Abril). La poesía es elaboración, es fingimiento. “El poeta es un fingidor que finge constantemente,que hasta finge que es dolor, el dolor que en verdad siente“.
Algo tímido aún, no obstante.
Agustín García Calvo, extraigo el siguiente fragmento de este enlace:“Suelo recordar, el caso de un supuesto niño al que los padres colocan delante del espejo con la intención de que se vea, se reconozca, y aprenda por tanto así a entrar en la Realidad. Hay por supuesto en ese niño, en el Alma de ese niño, una parte -la mayor- que estará siempre dispuesta al servicio, es decir, a complacer a los padres, a decir 'sí, wuanna'; esa es la mayor parte del Alma de cada uno, si no, no estaríamos sometidos al Estado y al Capital, como lo estamos. Pero algo le queda al Alma de ese niño, gracias a que nunca está bien hecha del todo, que no acaba de tragar y que es capaz de susurrar "Pero, ése no soy yo"”.
Y los que lo niegan, aunque no creo que sea el caso del humano y siempre dispuesto Gamoneda, pretenden una superioridad emocional y cívica de la poesía. ¡Oh! aduladores del poeta, ¡oh! deshacedores del verso. “Todo es poesía menos la poesía”, dirá Nicanor Parra.
O como ilustraba Daniel Aldaya, la poesía está en la llamada desesperada de una amiga que anda perdida y nos llama, y está en el raro milagro de la voz que la serena (en este caso la de Daniel).
Por citar a Flaubert: “Pues la palabra no es más que un eco lejano y debilitado del pensamiento”. A la palabra escrita, se refiere.
Aunque tampoco.
Mi amigo Luis Luna lo completará:”Por el poema hay que renunciar a lo que uno quiere decir”.
Y es esto, amigos. Es esto.
La llamada de esa querida amiga pasa. Y nuestra actitud y acierto ante otras similares no es siempre la misma.
Tan dispares emociones son las que habitan la poesía escrita…

El poema queda porque transciende, porque no imita a la vida, sino la inventa, o la re-crea, si quieren.
“Pero lo cierto”, queramos o no, “no es el poema”, querido Antonio(y me cito a mí mismo).”Es tan sólo un azar/ infortunado,/ un estallido torpe/ y cegador/ un camino sin fin/ y sin salida”. Lo cierto es la vida. Y es raro lo tuyo, Antonio, lo reconozco. Es raro que tras un buen poeta haya tan digna y atenta persona. Gracias, Daniel,por recordarnos que la poesía no está en el papel y en el poeta, sino en el lector. ¿O es en el hombre?

9 comentarios:

Margot dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

La eterna pregunta... y a veces pienso que habría que darle menos vueltas porque hacerlo es crear etiquetas y es querer encerrar un concepto casi inabarcable, tanto como el ser humano tomado de uno en uno. A mí me gusta pensar que la poesía es cantar para sí mismo, es tararear ideas, que es un legado ancestral y a ser posible debería ir acompañada de timbales mentales. Eso hoy, debe ser que me levanté neandertal... y extremadamente simple.

Un saludo de lunes!

Marga

Anónimo dijo...

Como bien sabrás amigo, yo miro a la poesia que es del hombre y para el hombre, la necesidad de la universalización de elementos, experiencias personales que nos hace o bien seres miserables o complejidad en si mismo, el poeta que se mira al ombligo, no es poeta, "la poesia no es de quien la escribe sino de quien la necesita". Un abrazo poeta. Jesuli

Anónimo dijo...

La poesía es comunicación, sin más, cuando el resto de las letras se miran en el espejo del ego, la vanidad y, por ende, la frivolidad imperativa.

Es, sencilla y llanamente, la literatura de los sentidos (que no son los mismos aunque sus sensaciones así nos lo indiquen). Ninguno tocamos lo mismo apesar de que lo deseemos y así, nos promovamos como manos tiernas con líbido oscura.

Para los que odian la poesía y, encima, lo manifiestan aunque la practiquen... supone el arrastrar contínuo de los genitales hasta que se encela a otro de la misma especie.

No es la gramática la que desarma sino la profunda mirada del esteta.

La poesía sigue brotando en el reverso de la primavera o, quizás, es un aura inversa que se desplaza desde el infierno.

nuaniu

Marcus dijo...

Pues yo no estoy de acuerdo con lo que dice Luis Luna (”Por el poema hay que renunciar a lo que uno quiere decir”). Se me pueden ocurrir cosas preciosas pero que jamás escribiría por lo que significan.

Animarte a ti, a todos los que te rodean. A todos los que hacen que la poesía siga viva. Y lo que es más dificil. Que sobreviva la buena poesía.

En mi opinión eres demasiado estudioso con la poesía. Eso consiwe que me guste hablar contigo de ciertas cosas. También creo que es necesario que exista gente como tú. Yo, simplemente, soy de esos que comen poesía (en muchas ocasiones la devoran).

Un abrazo
M

Marcus dijo...

Pues yo no estoy de acuerdo con lo que dice Luis Luna (”Por el poema hay que renunciar a lo que uno quiere decir”). Se me pueden ocurrir cosas preciosas pero que jamás escribiría por lo que significan.

Animarte a ti, a todos los que te rodean. A todos los que hacen que la poesía siga viva. Y lo que es más dificil. Que sobreviva la buena poesía.

En mi opinión eres demasiado estudioso con la poesía. Eso consiwe que me guste hablar contigo de ciertas cosas. También creo que es necesario que exista gente como tú. Yo, simplemente, soy de esos que comen poesía (en muchas ocasiones la devoran).

Un abrazo
M

Marcus dijo...

Pues yo no estoy de acuerdo con lo que dice Luis Luna (”Por el poema hay que renunciar a lo que uno quiere decir”). Se me pueden ocurrir cosas preciosas pero que jamás escribiría por lo que significan.

Animarte a ti, a todos los que te rodean. A todos los que hacen que la poesía siga viva. Y lo que es más dificil. Que sobreviva la buena poesía.

En mi opinión eres demasiado estudioso con la poesía. Eso consiwe que me guste hablar contigo de ciertas cosas. También creo que es necesario que exista gente como tú. Yo, simplemente, soy de esos que comen poesía (en muchas ocasiones la devoran).

Un abrazo
M

Jesús Malia dijo...

Pues yo creo que todos tenemos una idea de lo que es la poesía, que no es algo por lo que pasemos sin pensar. Puede ser una necesidad, pero es una necesidad intelectual, que requiere elaboración, y eso exige pensar bien en lo que haces y por qué. Aunque sea a posteriori.
Lo que se trata sin masticar nos indigesta.

Anónimo dijo...

Suscribo lo que apunta Jesús y añado... espiritual.

No hay más sombra que la que se cultiva.

Je!.

'speaking in tongues'