lunes, 6 de julio de 2009

Desde Bs As

4 de julio

-Primeros versos propios, o lo que sean, de lo que doy en llamar (no sé si con sentido, pero sí por querencia) 'Los buenos aires':

1

Camina
glaciar,
glaciar
respira.

Y son buenos los aires
que le mueven.
Son buenos los aires
que conducen
a la deriva.

2

Refleja
toda
la luz.
Ninguna luz
se prende
a la herida.

Blanco
glaciar
reflectante.

3

El frío
es
su aura
envolvente.
Intocado,
intocable.

Glaciar
perpetuo.

4

Asoma
el pico
en el mar.

5 de julio

-Javier Villafañe. 'Hay que regar antes que llueva' no es el libro esencial que me imaginé después de participar de su presentación. Siguiente el criterio de la brevedad, copia el siguiente poema:

No puede quebrarse el equilibrio
entre el Cielo y la Tierra.
La armonía sigue siendo perfecta.
La Cruz del Sur está en su sitio

y el hambre se reparte de la misma manera
sin alterar el llanto ni los gritos
ni el rumbo de las enredaderas
ni el pulso del gemido.

Distintas jaulas para el mismo canto
respetando los hierros de la cárcel
el amor controlado

el viento controlado, los amantes
los jueces y la coima, el nido de los pájaros
y el dos más dos son cuatro.

-Inédito de Borges (según se atribuye en Clarín):

Aquí. Hoy.

Ya somos el olvido que seremos.
El polvo elemental que nos ignora
y que fue el rojo Adán y que es ahora
todos los hombres y que no veremos.
Ya somos en la tumba las dos fechas
del principio y del término, la caja
la obscena corrupción y la mortaja,
los ritos de la muerte y las endechas.
No soy el insensato que se aferra
al mágico sonido de su nombre;
pienso con esperanza en aquel hombre
que no sabrá que fui sobre la tierra.
Bajo el indiferente azul del cielo
esta meditación es un consuelo.

-En el café Tortoni me dejan pasar a la sala de fumadores, aunque parece que le domingo no sirven allí. Un gintonic me tonifica para seguir con 'los buenos aires' mientras espero la hora del espectáculo de Les Luthiers. Aquí es fácil conseguir entradas.

5

No es paso
el paso
ni danza
el baile.

6

Golpe
de luz
que ciega
el alma.

7

Es
toda
la dicha,
¡sea la muerte!

8

Es aire
el aire
y toca
y marcha,
es luz
la luz
y toca
y vuelve.

9

Varar
no es
varar,
culminar
la deriva.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

me has traído a la mente una canción de calamaro que también juega con los buenos aires de allí

te envidio tu estancia, jesús, no conozco aquello y tengo un montón de amigas virtuales en la zona

Jesús Malia dijo...

¡Ay!, pero me lo están despoblando. Ya sin teatros, por esta psicosis que nos ha dado. Aún así, no lo cambio por nada.